Seguro que has leído más de una vez estas tres siglas: SKU.¿Pero sabes qué significan exactamente? Te lo contamos.

Un SKU, o Stock Keeping Unit en inglés, es un código único que se utiliza para identificar y diferenciar un producto de los demás en un inventario. Este código suele incluir información como la marca, el modelo, el color y el tamaño, entre otros detalles relevantes.

Cada empresa tiene la libertad de crear su propio sistema de SKU y decidir qué información se incluirá en él. Algunas empresas utilizan un generador automático de SKU para asignar un código aleatorio a cada producto de su inventario. Este tipo de generador puede crear códigos basados en diferentes criterios, como el tipo de producto, el proveedor o la fecha de entrada en el inventario. Por ejemplo, un generador automático de SKU podría crear un código como «PRD-1234» para un producto en particular.

Otras empresas, prefieren seguir un sistema específico de Stock Keeping Unit creado de forma manual, que les permita personalizar e incluir la información que deseen sobre el producto en el propio código.

¿Para qué sirve?

El objetivo del SKU es ofrecer una forma sencilla y precisa de identificar y rastrear los productos en el inventario de una empresa. Son especialmente útiles para las empresas que venden productos diferentes, como tiendas minoristas o tiendas en línea. Al utilizar un sistema de SKU bien organizado, los negocios pueden mantener un registro detallado de sus existencias y simplificar la gestión de su inventario.

Por ejemplo, en una tienda de ropa, cada prenda puede tener un SKU único que incluye información importante del artículo. Una camisa de algodón de la marca Levi’s en talla mediana y en color azul oscuro, podría tener un SKU como el siguiente: «LEV-CAM-ALG-MED-AZUL». La misma camisa pero en talla pequeña, podría tener el siguiente SKU: «LEV-CAM-ALG-PEQ-AZUL». Y así, con cada unas de las diferentes variantes.

De esta manera, el personal de la tienda puede buscar fácilmente la camisa en el inventario utilizando su SKU y asegurarse de que esté en stock y disponible para la venta. Además, los SKU también permiten a la tienda realizar un seguimiento del inventario y de las ventas de cada modelo específico de prenda, lo que puede ayudar en la toma de decisiones sobre compras y futuras estrategias de marketing para dar salida a determinados productos que quizá no se están vendiendo de como desearían.

Beneficios de usar un código SKU para los retailers:

  1. Rastreo de productos: Un buen sistema de SKU permite identificar cada producto siguiendo una lógica interna, lo que facilita su localización y asociación con otros datos de gestión de catálogo, como los niveles de stock, datos de fabricante o proveedores, envíos y pedidos, o previsiones de venta.
  2. Previsión de ventas: Al analizar el estado de tu catálogo mediante códigos SKU únicos, es más sencillo identificar los volúmenes de demanda y ventas de cada producto y la progresión en el tiempo, lo que permite tomar decisiones informadas sobre venta y promoción. Además, el análisis de costes e ingresos vinculados a cada SKU permite identificar rápidamente qué productos ofrecen mayor rendimiento y cuáles funcionan peor.
  3. Mejora el grado de satisfacción de los clientes: Utilizar un código SKU, permite que los equipos de atención al cliente y los vendedores en tiendas físicas pueden localizar más rápidamente los productos que busca un cliente, repetir un pedido anterior, hacer recomendaciones de productos similares y comparar características de productos. También se pueden ofrecer productos sustitutivos, es decir, alternativas, en caso de que un producto deseado esté agotado. En tiendas físicas, el uso de un código SKU, permite resolver de inmediato dudas sobre el stock sin tener que visitar el almacén ni rastrear las estanterías a mano, mejorando la experiencia de compra del cliente.
  4. Evita situaciones de sobrestock y roturas de stock: Al tener un mejor control del inventario, se puede reducir el número de artículos no vendidos o de stock sobrante, lo que ayuda a ahorrar en costes de almacenamiento y en el coste de los productos en sí mismos. Del mismo modo, al tener un mayor control de tu inventario, te ayuda a evitar situaciones de exceso de stock en almacén o de rotura de stock.

Consejos para crear un código SKU

Para empezar a generar códigos SKU es importante hacer de antemano una estructura básica para evitarte dolores de cabeza en el futuro. También es importante, tener en cuenta cuáles son tus necesidades y las de tus compradores para facilitarte el trabajo y generar un modelo de Stock Keeping Unit , que sea útil para tu empresa.

Por ejemplo, una empresa de muebles priorizará en su código SKU las medidas de los muebles, mientras que una tienda que vende calzado, seguramente prefiera añadir la talla de sus zapatos.

No hay una estructura correcta o válida, porque como ya hemos comentado, varía en función de las prioridades y necesidades de cada empresa. Puedes seguir estas recomendaciones:

  1. Elige un SKU específico y sencillo, así será más fácil identificarlo.
  2. Los dos o tres primeros caracteres pueden hacer referencia a la categoría del producto: por ejemplo: una camiseta, «CAM», o calzado, «CALZ». Los siguientes dos caracteres, podrían pertenecer a la subcategoría, los otros podrían ser la variante y por último el número de la secuencia.
  3. Sé consistente: utiliza un formato coherente y fácil de recordar para todos tus códigos SKU.
  4. Haz que sea único: asegúrate de que cada producto tenga su propio código SKU para evitar confusiones.
  5. Simplifica el proceso: utiliza un software de inventario que te permita crear SKU fácilmente y que se integre con tu sistema. Un ejemplo, es nuestro software de gestión de inventario Stockagile, que genera automáticamente códigos SKU.
  6. Incluye información relevante del producto: añade detalles como la marca, el tamaño, el color o el tipo de producto para ayudar a tus empleados a identificar el producto.
  7. Hazlo legible: asegúrate de que los códigos SKU sean legibles y fácilmente escaneables por tus empleados.
  8. Prueba el sistema de SKU antes de ponerlo en funcionamiento para detectar errores y hacer ajustes necesarios.

Evita hacer esto al crear un SKU:

  1. No uses códigos repetidos: asegúrate de que cada código SKU sea único para evitar confusiones en el inventario.
  2. No incluyas información innecesaria: no añadas información irrelevante al código SKU para evitar que se hagan más largos y difíciles de manejar.
  3. No te compliques: no crees un sistema de SKU demasiado complejo que dificulte el manejo del inventario y la realización de ventas.
  4. No te quedes estancado: revisa y actualiza tus códigos SKU según sea necesario para adaptarlos a los cambios en tu inventario o en tu empresa.
  5. No utilices el número 0 al principio, ya que algunos programas informáticos no lo aceptan bien.

Diferencias entre SKU, UPC y EAN

Existen diferentes códigos de identificación de producto. Pero no hay que confundirlo con un SKU. La principal diferencia entre el Stock Keeping Unit y el resto de casos, es que el primero es un código alfanumérico y el resto son un código de barras.

A continuación, te explicamos las principales características de cada uno de ellos:

UPC

Es numérico (compuesto por números)

Extensión de 12 caracteres

Uso externo

Representa información del producto y fabricante

Es de tipo universal

Diferencia SKU y UPC imagen

EAN

Es numérico (compuesto por números)

Extensión de 13 caracteres

Uso externo

Representa información del país, la empresa y el producto

Es de tipo universal

Diferencia SKU y EAN imagen descriptiva de los códigos

SKU

Es alfanumérico (compuesto de letras y números)

Extensión entre 8-12 caracteres

Uso interno

Representa información del producto

Es creado por la empresa o el vendedor

Código SKU creado manualmente

Para saber más sobre los distintos códigos de barras puede acceder a la página de GS1.